¡Que fácil la ves!, Oscar...

“Para escribir solo hay que tener algo para decir, y decirlo”.
Oscar Wilde.

Para el es fácil decirlo, fue una de las plumas mas virtuosas del planeta.
Pero partamos de la base que tiene razón. Tengo mucho para decir y quiero decirlo.
Así que desde este; mi espacio de chatarra sideral, lo hago.

Quiero ser un miembro más de la secta de místicos escritores que se hospedan en las carpetas secretas y misteriosas de alguno de los discos duros almacenados en alguna de las habitaciones refrigeradas en algún lugar del planeta.

Anónimo comentario que recorre la web en busca de lectores. Opinión al vació en busca de oídos. Manotón de ahogado…

Del mismo modo que el perdedor, el abatido, el rebelde, el cansado de la manipulación; se acoda a la barra a embriagarse, a buscar semejantes: con sus mismos traumas y problemas, miedos y anhelos; el participante de los blogs, tiene este como su único medio de catarsis anónima, así, podrá continuar con su vida mecánica y rutinaria, sin apenas desviarse del camino que ya le han marcado. El cual conoce perfectamente. Cada curva y recobeco. Cada posible destino; es conocido.

Las letras de mi bronca

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La huella de un golpe en el teclado.

(La digitalización del Dolor)

Me calenté y le encajé con los dos puños cerrados al teclado. Ya se que el periférico, (así le gusta llamarle a los técnicos en computación) no tiene la culpa; ¿pero a mi que?
Disfrute en hundirle algunas teclas, del mismo modo que si le hubiera bajado un par de dientes de la boca a algún musculoso contrincante que me estuviera molestando.

Así que podría estar en condiciones de afirmar que los caracteres que identifican a la bronca; al menos a la de ese momento, serian los de más arriba; o acaso podría ser el “¡Auch!” emitido por mi castigada computadora. En fin; la cosa es que; milagrosa e instantáneamente; en un documento de Word que tenia abierto; en este mismo que ahora le rinde homenaje; aparecieron las letritas, como un brote de angustia reprimida, una herida sangrante que, si uno las mira detenidamente, hasta las puede ver tristes y melancólicas; apenadas, doloridas…

Como consecuencia del exabrupto: me quede sin teclado.

Lo que me hizo enojar, aún existe. Perdí dinero; poco gracias a que los teclados son baratos.

Pese a todo fue extremadamente placentero. Lo recomiendo

Vi un Angel; se llamaba Fernanda

A Ella:
quien con su Pantalon Negro a Lunares Blancos
me partio en DOS: Tocaron B.M.

Los segundos lamen mis paredes con lengua inquieta, soñadora.
Colgado en una porción del tiempo cuento las horas.
Las apilo en bolsas con su nombre.
Montañas de nylon como olas.
Respiro aire envenenado fluye,
espeso su perfume.

La luna mira indiferente, con sonrisa fría de utileria.
Celofàn en techo de opaco brillo, me tira al amarillo rancio de mi vaso.
La luz regala a sus pies un manto plata de agua tibia;
herrumbre exhala mi ser:
podredumbre eterna que mi alma cuida.

Quite su mirada de la mía,
sus ojos moros de mi retina;
esos,
que conquistan si me miran.
Dejó su sombra a mi lado, y a puñaladas de luz la fui matando.
Sangraba noche por sus heridas,
a borbotones salpicaba
dolor junto a las mías
que;
curandose iban y reian con cada grito
que oían.

Clavado en su cruz me quedé, esperando su luz volver a ver.
Solo la sobras de su miel probé.
Y nunca mas la vi.

Bike,Desestres y fotografia...

Con musica al mango, por supuesto.

El tunel de 8 de octubre

En una de esas vueltas que me gusta dar en bicicleta.
La foto no es digital, esta escaneada, por eso la calidad no es de la mejor.
Para los que alguna vez han disfrutado sacar fotos con una reliquia rusa del estilo de una ZENIT 122; como la mia; sabrán el esfuerzo que hube de hacer para que, por lo menos, quedara enfocada. El auto me venia haciendo juego de luces para que me saliera de su camino. Fue divertido.

Documental Tarantino

Una especie de documental hacerca de Quentin.